Solidaridad, reivindicación del uso sostenible del agua y exaltación de nuestros Vinos en la Gala de anoche
Al acto asistieron el alcalde de Villarrubia de los Ojos, Miguel Angel Famoso, y otros miembros de la Corporación Municipal; el director general de Desarrollo Rural José Juan Fernández; la delegada provincial de Agricultura, Amparo Bremad; los diputados regionales Lola Merino y Francisco Núñez; los diputados provinciales Leopoldo Sierra y Mª Antonia Alvaro; el alcalde de Bolaños y presidente del PP provincial, Miguel Angel Valverde; y representantes de ASAJA, Masa Occidental de Regantes y Cooperativas Agroalimentarias de CLM, miembros del Consejo Rector anfitrión; los presidentes de El Progreso, Jesús Julián Casanova, y El Rubial, Miguel Jiménez, y la presidenta de la Hermandad de San Isidro Lucía Banegas, entre otros, junto a cientos de personas.
Jesús Julián Casanova comentaba que se trataba de un acto solidario, cultural y reivindicativo, el tercero que organizamos El Progreso y otras entidades, “este año dedicado al uso sostenible del agua y donde exaltaremos nuestros vinos también degustándolos que es lo mejor que se puede hacer, y pondremos en valor la concienciación de los agricultores por la sostenibilidad y haremos una llamada de atención a las Administraciones públicas, porque el agua es muy importante para nosotros y para fijación de población en la España vaciada”.
Francisco Turrión explicó y ofreció “un nuevo modelo de gestión y funcionamiento hidrogeológico de las Tablas de Daimiel y los Ojos del Guadiana, diferente al que nos han explicado hasta ahora, donde lo importante sería que con la ayuda del Estado, alejar focos de bombeos de las surgencias de los Ojos del Guadiana y Tablas, y regar esas mismas zonas pero con agua traída de pozos más alejados, porque así sería sostenible compatibilizar las Tablas de Damiel con el uso sostenibles de las aguas subterráneas de los Ojos y las Tablas”.
Para el experto “hay muchos intereses en el negocio de la escasez y que todos tengamos el negocio del agua por una tubería, al igual que el del gas por un oleoducto, de manera que quien controla esa tubería o el gasoducto es el que tiene el monopolio, al igual que ocurrió con las placas solares, donde hubo tantas dificultades para que los ciudadanos se autoabastecieran de energía solar, con el agua subterránea ocurre igual, hay mucho interés en que la gente no sea autosuficiente en agua”.
Dejaba claro Turrión que “el trasvase Tajo-Segura resulta innecesario, y que, con un uso adecuado de los recursos subterráneos, la cuenca del Segura sería autosuficiente y no necesitaría de aportes externos. Hay más técnicos y recursos en las Confederaciones dedicados a las aguas superficiales que a las subterráneas”.
Y se preguntaba también que “según estudios de 2018, se dice que el agua subterránea es siete veces superior a la superficial. Esta agua no consta en la planificación hidrológica. Y si no sabemos el agua que hay embalsada en las masas subterráneas o a qué porcentaje se encuentras las aguas subterráneas embalsadas, ¿por qué decimos que un acuífero está sobreexplotado?”.
